Puebla es enigmático desde su origen y hasta nuestros días,
contiene un desarrollo como muchas ciudades en el mundo, a
veces crecimiento lento y ordenado y otras veces rápido y caótico,
siempre manteniendo sus orígenes bien protegidos como su
mismo patrimonio en resguardo, así mismo su desarrollo que
siempre tiende al equilibrio y con mucha nitidez que conlleva al
manejo de recursos materiales, social y naturales que proporcionan
su propia identidad y vocación de una ciudad colonial.
Los aportes que se incluyen en este artículo implican que
aún falta mucho por desarrollar, aportar y difundir en el
campo de la ciudad, el urbanismo, o de la actividad socioeconómica
de Puebla, incluido el comercio, como una
ciudad en progreso constante.