La marca es mucho más que el nombre que se le da a un producto o servicio, forma parte del activo de una compañía y revela parte de su saber hacer, pero sobre todo se asocia al valor añadido del alimento o bebida, especialmente en el caso de enseñas escogidas y asociadas
a sellos de calidad que remarcan su potencial, como las denominaciones de origen y de calidad diferenciadas,
que añaden una virtud, lo que los expertos denominan las bondades de lo próximo. El consumidor español valora el precio y la calidad, pero para un amplio porcentaje de compradores el origen del producto es tan importante como su coste.