Seguramente fue por intuición, pero todo parece
indicar que desde los tiempos más primitivos, cuando había
carne siempre se prefería a cualquier otro alimento. La
ciencia nos ha demostrado luego que el valor nutricional de
este producto es muy alto, que sus proteínas tienen un gran valor
biológico, lo que significa que se aprovechan mejor y que aportan
aminoácidos que no se encuentran fácilmente en otros alimentos.
También es muy posible que pronto se observase que la carne es lo