El aceite de oliva es el producto
más significativo de la dieta mediterránea.
Es la grasa que sirvió de base
a Keys, junto con Grande Covián, para enunciar
la denominada “Teoría lipídica”, que demuestra
que es la más perfecta y equilibrada
para que nuestro organismo esté preparado
para evitar las más importante causas de
mortalidad, en las sociedades evolucionadas,
en las que con mucha frecuencia se ingieren
más nutrientes de los necesarios, lo
que da lugar a sobrepeso, obesidad, episodios
cardiocirculatorios, mayor incidencia
de problemas oncológicos y otros muchos
problemas que tienen su raíz en los desajustes
alimentarios.