El presidente de Mercasa, José Miñones, se ha se reunido con el Comisionado del Gobierno para el Corredor Atlántico, José Antonio Sebastián, para establecer una estrategia de colaboración y trabajo conjunto que favorezca la conexión de la red de Mercas al Corredor Atlántico, impulsando la expansión de la logística de los mercados y el uso de las autopistas ferroviarias, en las que los semi-remolques de los camiones son transportados en tren.
En el encuentro, se abordó las posibilidades de aprovechar las infraestructuras intermodales que incluye el Corredor Atlántico, así como las futuras autopistas ferroviarias que puedan operar en su trazado, para optimizar la distribución de los cerca de nueve millones de toneladas anuales que mueve la red estatal de mercados, gestionada por Mercasa con 24 ayuntamientos. Ambos responsables han coincidido en destacar la importancia y oportunidad que se genera con esta colaboración para avanzar hacia una distribución de productos frescos más eficiente y sostenible.
El Corredor del Atlántico es una de las principales arterias de transporte en Europa. Su desarrollo permitirá la incorporación los estándares de calidad marcados por la UE para las infraestructuras de su red básica de transporte, así como unos requisitos de interoperabilidad ferroviaria, que permitirán dar un impulso al transporte de intermodal de mercancías y a la descarbonización. En España, el Corredor Atlántico incluye actuaciones en 2.880 kilómetros de la red de carreteras, en 5.413 kilómetros en la red ferroviaria, nueve puertos, cinco aeropuertos, nueve terminales intermodales y 20 nodos urbanos. De ahí, que las sinergias con la red de Mercas y los movimientos de sus mercancías sea tan elevada.
Los importantes avances que se están llevando a cabo para el desarrollo del Corredor Atlántico, permite poner en marcha de forma inmediata un análisis que aborde las oportunidades y sinergias para Mercasa del uso de estas infraestructuras y valorando especialmente el uso tanto del modo ferroviario en general como de las autopistas ferroviarias en particular.
Conectar la Red de Mercas a esta infraestructura no solo impulsará la competitividad de los mercados mayoristas, facilitando el comercio y la movilidad tanto a nivel nacional como internacional, sino que también contribuirá a la reducción de la huella de carbono del sector logístico agroalimentario. Se trata, de un paso clave lograr una cadena alimentaria más sostenibles.
Mercasa ya cuenta en la actualidad con un proyecto intermodal en funcionamiento, en TMZ de Zaragoza, y la experiencia acumulada en estos años permite un diseño más rápido de la red con el objetivo de potenciar la conexión directa de las mercas con los puertos, abriendo a los proveedores la vía internacional y conseguido un ahorro de emisiones de CO2 para un producto ecofresco.
El Comisionado del Corredor Atlántico, José Antonio Sebastián, se ha mostrado convencido del potencial que tiene el Corredor Atlántico para el movimiento de mercancías de la red de Mercasa. “Contar con una infraestructura intermodal, interconectada y con los estándares de calidad marcados por Europa facilita el avance real hacia cadenas de suministros mucho más eficientes y sostenibles. Para nosotros, colaborar con la industria y las cadenas de suministro para facilitar su uso es un objetivo prioritario, ya que los corredores de transporte no son un fin en sí mismo sino un medio hacia la competitividad y productividad del tejido empresarial y hacia la cohesión territorial”, explicó.
Por su parte, el presidente de Mercasa, Jose Miñones, ha destacado la importancia de diseñar la merca del futuro en base a criterios de sostenibilidad y competitividad, a través de la colaboración pública y en la que los grandes beneficiarios sean los productores, mayoristas y consumidores, con un producto más directo, eficiente y sostenible.
Este encuentro se complementa con el mantenido por Mercasa hace unas semanas con el Corredor Mediterráneo, con el objetivo de avanzar en el desarrollo de sinergias conjuntas.