La Producción Final Agraria (PFA) de Navarra alcanzó en 2022 un valor de 1.375 millones de euros, de los que unos 656 correspondieron a la aportación del sector agrícola (Producción Final Vegetal, PFV), otros 664 millones de euros al ganadero (Producción Final Ganadera, PFG) y el resto (55 millones de euros) a las aportaciones del sector silvícola y de los servicios.
La Renta Agraria de Navarra en 2022 se aproximó a los 619 millones de euros, una vez restados los consumos intermedios, y sumadas las amortizaciones y subvenciones.
Tradicionalmente, el sector vegetal ha aportado más que el animal a la PFA navarra, pero las malas cosechas, la subida de los costes de producción y unos precios más moderados han provocado pérdidas de valor en los últimos años.
Dentro de la agricultura, el cultivo de cereales es el que ocupa una mayor superficie y en 2022 tuvo malos resultados. Las cosechas de trigo y cebada se redujeron considerablemente y lo mismo sucedió con otros cereales secundarios.
Por delante de los cereales en su aportación a la PFA están las hortalizas con el 21% del valor total. En 2022 las cosechas fueron, en general, peores que las del año anterior, aunque también hubo excepciones en verduras muy representativas, como el tomate, el brócoli o las espinacas. El tercer grupo de cultivos en importancia económica es el de los forrajeros, que se destinan mayoritariamente a la alimentación animal.
Por su parte, el sector de las frutas tuvo un balance desigual y en cuanto al vino, la vendimia tuvo un saldo negativo. Otra producción importante es la patata, de la que se produjeron 9.500 toneladas, casi un 26% menos que en 2021.
En cuanto a la producción de vino, descendió un 3% hasta los 602.500 hectolitros. La mayor parte de este volumen correspondió a vinos con marca de calidad diferenciada.
Otro sector que también es importante en la agricultura navarra es el del aceite de oliva, que saldó la campaña 2022/2023 con resultados muy negativos, pues se produjeron sólo 5.000 toneladas frente a las 5.700 de la campaña anterior.
Con respecto al sector ganadero, que aporta cerca del 40 % de la PFA, el balance general fue positivo. Así, el sector de la carne de aves (la más importante) registró un aumento de producción del 10%; la de vacuno del 28%, la de porcino del 5% y la de equino del 8%. En sentido contrario, ese año descendió la producción de carne de ovino.
La producción láctea tuvo un mal comportamiento, especialmente en producción. Se produjeron 215.700 toneladas de leche de vaca (un 2% menos que en 2021), lo que representó el 3% del total nacional.
Junto con la producción de leche de vaca, en Navarra hubo también unas 16.900 toneladas de leche de oveja, un 6% más que en el año anterior.
Respecto al comercio exterior, las exportaciones crecieron un 12,1% respecto al año anterior, alcanzando un valor de 1.611,1 millones de euros, el 2,4% del total nacional. Prácticamente el 80% del valor de los intercambios comerciales con el extranjero se realizó con los países de la UE, principalmente con Francia.
En Navarra está situado uno de los mercas que componen la Red Mercasa, Mercairuña. Concentra una de las ofertas más amplias y diversas de alimentación fresca, con los mejores productos nacionales y de diferentes países. Todo en un único espacio, que trabaja día y noche para abastecer la demanda de producto fresco en Navarra.
Reúne tanto a los Mercados Centrales de Pescados, Frutas y Hortalizas de Pamplona, como a empresas polivalentes especializadas en el sector alimentario y servicios.
Mercairuña se constituyó oficialmente el 27 de diciembre de 1974. La empresa de economía mixta “Mercados Centrales de Abastecimiento de Pamplona. Mercairuña S.A.” nació con un objetivo fundamental: contribuir a la rápida modernización de las estructuras de distribución mayorista de productos de alimentación perecederos en la comarca de Pamplona, sin descartar el conjunto de Navarra y las zonas limítrofes.
La sociedad se fundó con un capital social de 350 millones de pesetas, aportados por tres accionistas:
- Ayuntamiento de Pamplona (51%)
- Empresa Nacional Mercasa (40%)
- Comunidad Foral de Navarra (9%)
Cuatro años más tarde, en el transcurso de dos sesiones celebradas el 31 de enero y el 2 de febrero de 1978, el pleno del Ayuntamiento de Pamplona le otorgó la concesión de la gestión de los mercados centrales de la capital navarra.
De esta forma, en enero de 1979, el Mercado Central de Frutas y Verduras abrió sus puertas en el Soto de Aizoain, acogiendo a los mayoristas instalados hasta entonces en el antiguo Mercado Central de abastos ubicado en la Calle Monasterio de Irache. La lonja de pescados se trasladó al Soto de Aizoáin en 1982.
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