El sector de alimentos ecológicos se considera estratégico en
España, que es el primer productor de la UE y cuarto del mundo,
con una superficie total de dos millones de hectáreas de
cultivo. Atomización y especialización son comportamientos
paralelos a la democratización del consumo de los productos
ecobiosostenibles, si bien es preciso que se alcance madurez
en el mercado para que los precios se puedan equiparar a
los de sus homólogos. El nuevo Reglamento de la Producción
Ecológica en la Unión Europea, también llamada orgánica o
biológica, entrará en vigor a comienzos de 2021; entre sus
objetivos destaca la prevención del fraude y el aumento de la
confianza del consumidor en estos alimentos.